Cada temporada de gripe es distinta y la infección por el virus puede afectar a las personas de maneras diferentes.
Millones de personas se enferman de gripe todos los años, cientos de miles son hospitalizadas y miles o decenas de miles mueren por causas relacionadas con la gripe cada año. La vacunación anual contra la gripe estacional es la mejor forma de protegerse.
Según la Secretaría de Salud de la Nación, la gripe, una enfermedad viral respiratoria muy contagiosa, puede ocasionar complicaciones graves e incluso la muerte especialmente en los grupos de riesgo.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) recomiendan la vacunación como el primer paso y el más importante para protegerse contra la influenza y las posibles complicaciones graves. Según los CDC, todas las personas a partir de los 6 meses de edad deben vacunarse contra la gripe cada temporada, especialmente los que están en alto riesgo.
Las estimaciones de los CDC, indican que en la temporada de gripe 2018-2019 en ese país hubo cerca de 42 millones de enfermos por gripe y entre 531.000 y 647.000 hospitalizaciones.
La vacunación es particularmente relevante en personas con alto riesgo de presentar complicaciones por la gripe e incluyen a los niños pequeños, a las mujeres embarazadas, las personas con afecciones crónicas como asma, diabetes, o con enfermedad cardiaca o pulmonar y adultos a partir de los 65 años. Asimismo, la vacunación es importante para los trabajadores de la salud.
La vacuna contra la gripe hace que los anticuerpos se desarrollen en el organismo aproximadamente dos semanas después de la vacunación y brindan protección contra la infección por el virus de la influenza. Por tal motivo es mejor vacunarse antes que comience la temporada de gripe. Estos anticuerpos brindan protección contra la infección por los virus incluidos en la vacuna. Si bien existen diferentes tipos de virus de influenza, la vacuna contra la gripe estacional protege contra los virus que, según las investigaciones, serán los más comunes la próxima temporada. Las vacunas de tres componentes contienen un virus A(H3N2), un virus A(H1N1) y un virus B. Las vacunas de cuatro componentes o cuadrivalentes, tienen un componente adicional del virus B.
“Las vacunas cuadrivalentes al contener un segundo virus B brindan una protección más amplia contra la gripe. A principios de mayo, Sanofi Pasteur recibió la aprobación de parte de Anmat, de la indicación de la vacuna cuadrivalente a partir de los 6 meses de edad. De esta manera, la vacuna antigripal cuadrivalente cuenta con una sola presentación para todas las personas a partir de los 6 meses”, señaló Judith Armoni, Directora Médica para Cono Sur.
Diversos estudios reflejan que la vacunación contra la gripe no solamente previene las enfermedades relacionadas con la gripe, sino que también reduce las consultas médicas, las ausencias en el lugar de trabajo y en la escuela, y puede prevenir las hospitalizaciones relacionadas con la enfermedad. Además, un estudio del 2017 demostró que la vacunación contra la influenza puede reducir de forma significativa el riesgo de muerte por gripe en los niños.
Otro estudio del 2018 demostró que entre los adultos hospitalizados con gripe, los pacientes vacunados tenían 59 por ciento menos de probabilidades de ingresar a una unidad de cuidados intensivos que los que no se vacunaron. Entre los adultos que se encontraban en la unidad de cuidados intensivos a causa de la influenza, los pacientes vacunados en promedio pasaron 4 días menos en el hospital que aquellos que no se habían vacunado previamente.
Es importante, además de la vacunación, tomar medidas parareducir la propagación de gérmenes yprevenir el contagio, tales como cubrirse la boca y la nariz con el brazo al toser o estornudar, lavarse las manos frecuentemente y mantener los ambientes limpios y ventilados.