Noticias de Salud Radio entrevistó a la Dra. Claudia Galloso, médica especialista en enfermedades infecciosas del Sanatorio San Lucas (MN 95.557). Participó de un zoom internacional con el equipo de investigadores rusos que desarrolló la vacuna Sputnik V. Todo lo que tenés que saber sobre mitos y verdades de las vacunas contra la Covid-19 en esta nota.
-El presidente Alberto Fernández anunció que antes de fin de año se podrán vacunar 300 mil personas contra la Covid-19. ¿La pesadilla de la pandemia está llegando a su fin?
-La pandemia no está llegando a su fin. En el hemisferio norte están viviendo la segunda ola que viene recrudecida con pacientes aún más graves. En Estados Unidos y Alemania están colapsando los sistemas de salud. En Argentina estaríamos viendo el descenso de la primer ola. Lo que se intenta con la vacunación es mitigar la segunda ola que llegaría a al país en mayo o abril, pero el virus va a seguir circulando en forma muy baja.
-Con el diario del lunes, ¿fue muy larga la cuarentena?
-La cuarenta estuvo bien porque si hoy miramos las estadísticas somos el tercer país en la américas con mayor cantidad de infectados (1°Estados Unidos 2° México); pero la mortalidad que tuvimos es muy baja. La cuarentena logró que el sistema de salud se reforzara y no colapse; aunque todavía hay que ver cómo les va nuestros hermanos de Salta, Santiago del Estero y del Gran Rosario que son los más complicados. En Alemania y Francia los médicos tuvieron que elegir a quienes se le daba sistema de terapia intensiva y a quienes no. En Argentina no hemos llegado a eso, en ese sentido la cuarentena no fracasó. Lo que no se hizo bien fue aplicar a tiempo protocolos de salida más ordenados y precoces en determinadas áreas. Fue acertado pasar del Aislamiento Preventivo, Social y Obligatorio (ASPO) al Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio (DISPO); pero lamentablemente se nota una falta de conciencia social, por lo que estamos lejos de que la epidemia se vaya. Es de destacar el cumplimiento de la gente en la primera parte del ASPO. Naturalmente, todos estamos agotados de esto, imagínense nosotros los profesionales de la salud que no pasamos del ASPO al DISPO, porque seguimos trabajando igual desde marzo. Estamos contentos de que el sistema de salud no esté colapsado y de que algunos podemos regresar a casa.
-¿La vacuna resuelve el problema?
-Cuando una persona tiene Covid nos hemos dado cuenta que a los dos o tres meses ya se quedan sin anticuerpos y pueden reinfectarse. Por lo tanto, lo que viene a hacer la vacuna es que la persona curse la enfermedad en forma leve y no tenga las complicaciones que lo llevan a la internación. Pero la vacuna no evita la enfermedad. Es como en la gripe, con la vacuna se adquiere la enfermedad en forma leve, pero no impide que una persona adquiera la enfermedad.
-¿Cuánto tiempo me van a proteger los anticuerpos de las vacunas nuevas?
-El desarrollo de una vacuna tiene cuatro fases. Las cuatro vacunas más conocidas están en fase 3, en la cual, participan voluntarios humanos sanos sin comorbilidades con el método doble ciego (un grupo recibe placebo y otro la vacuna, pero nadie sabe qué le toca). Para saber si los anticuerpos duran o no, tenemos que saber cuánto tiempo hace que esas vacunas están en fase 3; justamente la ventaja de la vacuna rusa es que tiene fase 3 desde agosto. Integrantes del ejército ruso fueron los voluntarios que recibieron dos dosis y siguen manteniendo anticuerpos con un 95% de efectividad. Las otras vacunas (AstraZeneca o Pfizer) no tienen tanto tiempo de fase 3 y serían aprobadas recién en enero. Por eso, estamos muy esperanzados con la vacuna rusa porque tiene más tiempo de desarrollo.
-Participaste de un zoom internacional con el equipo de investigación ruso que desarrolló la vacuna Sputnik V. ¿Cuál fue el balance de esa reunión?
-El zoom internacional fue el pasado miércoles (2 de diciembre) a través de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para toda Latinoamérica. Tuvimos la oportunidad de escuchar todo su trabajo y sacarnos todas nuestras dudas. Había un traductor simultáneo y los investigadores rusos respondieron todas las preguntas que los especialistas argentinos les hicimos. En resumen, la vacuna rusa es muy parecida a las otras que están en desarrollo. La gente debe quedarse tranquila porque hay un comité asesor que no va a aprobar la vacuna o cualquier fármaco si algo no está bien. Hay que tener en cuenta que la vacuna rusa no pasa por la prueba de la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) de Estados Unidos ni por la Agencia Europea del Medicamento (EMA). Esto significa que la Anmat de Argentina va a tener que aprobar directamente la vacuna y eso es lo que a nosotros nos tiene preocupados porque somos los que tenemos que hacer el trabajito de asesorar a la Anmat. Normalmente, cuando una vacuna viene aprobada de la FDA y la EMA automáticamente se revisan algunos detalles administrativos y legislativos y se aprueba. En el caso de la vacuna rusa, la vamos a tener que aprobar desde cero. Reitero, que la gente esté tranquila porque si algo no está bien no la vamos a aprobar.
-¿Cuál es la conducta o el factor que hace que los casos de coronavirus suban?
-Cuando no podemos logar la distancia de dos metros; cuando no se usa tapabocas y hay un contacto de más de 15 minutos; cuando no nos lavamos las manos; o cuando aparece un aglomeramiento al aire libre como los que vimos hace poco por la tele.
-¿Lo de Maradona va a traer un pico de contagios?
-Se trata un ídolo nacional que se entiende lo que fue para el pueblo argentino. Entonces, si le vamos a permitir al pueblo hacer un homenaje es imposible compatiblizar eso con alguna norma porque sabemos que las emociones son las emociones. Por lo tanto, cuando se toma una decisión así hay que prepararse para un pico de contagios que puede darse entre 7 y 10 días después de lo que pasó. Estamos preparados para contener esa situación. Lo mismo puede suceder en el verano en la costa. Sin coronavirus en playas de Villa Gesell y otras de la costa siempre hay desborde. Sumemos el alcohol y otras yerbas que es algo que siempre pasa. No miremos para otro lado y seamos adultos responsables. Es muy fácil armar un protocolo lo difícil es hacerlo cumplir.
-¿Qué es lo más importante que tenemos que saber acerca de los mitos y verdades de la vacuna contra la Covid-19?
-La primer verdad es que si la vacuna no se aprueba no se usa. No se va a usar a la gente como conejillos de indias. Argentina se debe asegurar tener 48 millones de vacunas porque somos 48 millones de argentinos. El gobierno de la Nación compra o seña 22 millones de la vacuna rusa; 8 millones de AstraZeneca; 8 millones de la farmacéutica estadounidense Pfizer; y 10 millones de la vacuna australiana (V451). Esto es importante por si alguna de esas vacunas se cae. ¿Por qué no compra 22 millones de la de Oxford o Pfizer? Porque no tienen la capacidad de desarrollo de tantas vacunas.
-¿Qué tenemos que saber acerca de la logística?
-En ese tema pueden surgir complicaciones. Por ejemplo, la vacuna de Pfizer se transporta a menos 70 grados, lo que sería un freezer especial donde se guarda la sangre. Todas las ciudades grandes como Buenos Aires lo tienen para transfusiones de sangre. Entonces en las grandes ciudades se podrá distribuir la vacuna de AstraZeneca o Pfizer, pero Argentina no es solo Buenos Aires. La vacuna tiene que llegar a otras provincias como Jujuy, Chaco, Santiago del Estero, Formosa o Misiones a menos de 70°. Por eso, la ventaja de la vacuna rusa Sputnik V es que no necesita ser transportada a menos 70°. Por lo tanto, es una buena opción para que esa vacuna llegue a esos lugares que no tienen los equipamientos mantenerla a determinada temperatura. Supongamos que se compran muchísimos freezers especiales. Pensemos que normalmente sin estar en pandemia todos prendemos los aires acondicionados y colapsamos el sistema de luz generando cortes. ¿Tendríamos que tener un grupo electrógeno para cada freezer en cada lugar de vacunación?. Por eso, es tan importante que busquemos aquellas vacunas que se transporten en heladerita como se hace con los órganos. No es tan fácil el tema.
-El 3 de diciembre fue el Día del Médico/a, ¿algo para decir?
-Para nosotros ser médico no es una profesión es una vocación, es lo que somos. Eso lo saben nuestros hijos/as, esposos/as y parejas. Los trabajadores de la salud estamos muy cansados. Es un recurso que no se puede fabricar rápidamente como la vacuna que va a llegar; la gente va a estar bien atendida porque la contención de la epidemia está bien armada. Lo que no hay es recurso humano. No hay nuevos enfermeros. Mi mayor desafío durante la pandemia era ver a mis compañeros enfermos o muertos. Por eso, creo que no es un día para festejos, sí agradecemos que se acuerden de nosotros, pero quiero que se acuerden también de los trabajadores de la salud que murieron. Creo que nos deben un duelo nacional y el reconocimiento a los enfermeros. Ellos no son administrativos son de la medicina pública. Todos merecemos la reconstrucción salarial. Nosotros nos seguimos acordando lo que las prepagas y obras sociales nos pagana a los médicos/as.