Dejar de fumar es muy difícil, pero posible

¿Sabías que el consumo de tabaco también es la causa de muerte más evitable en el mundo? Ni bien se abandona el cigarrillo aparecen múltiples beneficios en la salud física y emocional.  

Todos los años, en el mundo entero, se conmemora la Semana sin Humo que cierra el 31 de mayo con el Día Mundial Sin Tabaco. Cada año aumenta la importancia de esta conmemoración, ya que la epidemia de tabaquismo es un problema internacional con serias consecuencias sanitarias, sociales, económicas y también ambientales.

Una epidemia responsable de más de 5 millones de muertes anuales en el mundo, de costos sanitarios y ambientales que exceden las recaudaciones fiscales por impuestos al tabaco, que se cobra más vidas que la tuberculosis, el VIH y el paludismo juntos y representa la primera causa de muerte prematura, posible de evitar a nivel mundial.

Sin embargo, el consumo y la producción de cigarrillos y otros productos derivados del tabaco aumenta año tras año, particularmente en los países en desarrollo en los cuales también aumentan la mortalidad atribuible al tabaco y la carga que las enfermedades y las muertes imponen a las familias, a la población de bajos recursos y a los sistemas nacionales de salud.

Científicamente ha sido reconocido que el tabaquismo es una adicción, una adicción física y emocional a la nicotina. A medida que pasa el tiempo, fumando se va creando un lazo emocional con los cigarrillos que sirven para calmar y relajar los nervios en los momentos difíciles, hasta al tomarse un café y compartir los momentos más felices con familiares o amigos.

La nicotina es una sustancia altamente adictiva y los cigarrillos y otros productos que contienen tabaco están diseñados con el fin de crear y mantener esa dependencia. A pesar de estar comprobado y difundido que fumar es malo para la salud, muchos fumadores preguntan por qué deben dejar de fumar.

Muchos de los compuestos que contienen los cigarrillos y el humo que producen son farmacológicamente activos y tóxicos.

Fumar es mucho peor de lo que se imaginan los fumadores: el humo del cigarrillo contiene cerca de 4000 productos químicos distintos que causan la muerte de uno de cada dos fumadores.

Fumar causa enfermedades cardíacas y pulmonares severas, el 90 por ciento de los pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica son fumadores y el 85 por ciento de los casos de cáncer de pulmón también ocurren en fumadores.

Fumadores pasivos

Estas complicaciones y otras más no son exclusivas de los fumadores, también perturban la salud de los no fumadores o fumadores pasivos, que podrían prevenirse si los que comparten o conviven con ellos dejaran de fumar.

Estos fumadores pasivos, a largo plazo, aumentan hasta un 30 por ciento el riesgo de enfermedades del corazón y cáncer de pulmón, mientras, ya en los pequeños, es causa de frecuentes otitis, afecciones respiratorias y también asma bronquial.

¿Sabías que es la causa de muerte más evitable en el mundo?

¡CONOCÉ LOS BENEFICIOS!

Frente a semejantes daños, afortunadamente, podemos afirmar que el consumo de tabaco también es la causa de muerte más evitable en el mundo y tres de cada cuatro fumadores nos manifiesta sus deseos de dejar de fumar. Si bien dejar de fumar es muy difícil, también es posible y uno de cada cuatro que se lo propusieron lo ha logrado.

Los beneficios son diversos y algunos de ellos comienzan a manifestarse ni bien se ha dejado de fumar. A medida que el cuerpo se desintoxica de la nicotina, mejoran la calidad de la piel, los ojos, las manos, el aliento, el pelo y hasta la ropa mejora el olor.

Las comidas tienen mejor sabor, los olores preferidos se huelen mejor, aumenta la energía corporal y la respiración mejora como antes cuando no fumaba; se normaliza la oxigenación de la sangre y después de las 48 horas a 72 horas sin fumar aumenta la capacidad pulmonar.

En uno a dos meses sin fumar mejoran la circulación de la sangre y la función pulmonar en un 30 por ciento. Mejoran la tos y el cansancio propios del fumador. Y, con sólo un año sin fumar, el riesgo de un ataque cardíaco se reduce a la mitad, en 10 años el riesgo de morir por cáncer de pulmón también se reduce a la mitad, y con más de 10 años sin fumar el riesgo de ataques cardíacos ya es el mismo de las personas que nunca fumaron.

Beneficios emocionales

Los beneficios son muy evidentes y no se limitan al campo físico porque también hay beneficios emocionales; el hecho de comprobar que se ha podido cortar el hábito y poner fin a la dependencia con el cigarrillo, pudiendo adaptarse a situaciones estresantes sin necesidad de recurrir al chupete que fue el cigarrillo, sirven para recuperar la autoestima y la energía necesarias para hacer las cosas que gustan.

Beneficios financieros

Por dejar de fumar también resultan beneficios financieros, porque se ahorra el dinero que antes se gastaba comprando los cigarrillos y también se reducen los gastos por la atención médica y los medicamentos para tratar las complicaciones derivadas del consumo de tabaco.

Motivos para dejar de fumar

Casi todos los fumadores tienen motivos para dejar de fumar, por razones de salud, por la apariencia personal, por la presión de la familia o de los amigos, motivos que servirán para animarlos, para darle fuerza a la decisión de dejar de fumar y para recordarlos siempre porque pueden resultar de gran ayuda en los momentos difíciles que podrían inducirlos a volver a fumar.

Mientras tanto, algunos fumadores necesitarán recurrir a su médico para comunicarle su decisión y los motivos de esa decisión, y recibir del él el apoyo necesario y los recursos disponibles que aumentarán las probabilidades de éxito en esta nueva empresa que se han propuesto para dejar de fumar, disfrutar de la vida sin la necesidad del cigarrillo y, al final del tratamiento, felicitarse y premiarse por haber logrado un cambio tan importante en la vida.
Por Juan Baláz para Noticias de Salud