Pediatras estadounidenses consideran que la actividad puede estimular la adquisición del lenguaje y otras capacidades comunicativas, además de reforzar la relación con los padres.
La Academia estadounidense de pediatría (AAP) recomienda a los padres que lean cuentos a sus hijos desde su nacimiento hasta los tres años. Según los especialistas es una eficaz manera de estimular la adquisición del lenguaje y otras capacidades comunicativas.
Para la AAP “leer con regularidad cuentos a niños desde que nacen estimula de manera óptima su cerebro y refuerza la relación con los padres en un momento crucial de su desarrollo. Así, los niños desarrollan el lenguaje, el aprendizaje de la lectura y adquieren capacidades socio emocionales para el resto de su vida”.
Este concepto también se sustenta en que, tal como lo afirman cada vez más neurólogos, parte importante del desarrollo del cerebro se da durante los tres primeros años de vida.
La AAP recomienda a los pediatras que en el marco de sus consultas promuevan ante los padres, sobre todo aquellos de contexto crítico, este acercamiento a la lectura para los recién nacidos y hasta los tres años, cuando entran en el ciclo preescolar.
Desde la academia señalan que un niño de cada tres en Estados Unidos llega a preescolar sin los conocimientos suficientes como para aprender a leer.
Asimismo, la academia de psiquiatría recuerda que cada año el 75 por ciento de los niños y el 80 por ciento de los que viven debajo del umbral de la pobreza en Estados Unidos no alcanzan un nivel de lectura suficiente en quinto año de primaria, es decir a los ocho o nueve años.
“Hay que alentar a todos los padres a leer en voz alta textos a sus hijos chicos, lo que puede reforzar la relación entre ambos y prepararlos a adquirir lenguaje y las primeras bases de la alfabetización”, aseguran desde la AAP.
Si bien, algunos padres con estudios superiores ya leen poesía y hacen escuchar Mozart a sus hijos desde que son fetos, investigaciones muestran que muchos otros no leen historias a sus hijos con la frecuencia que recomiendan los investigadores.
Cabe destacar que es la primera vez que la AAP emite este tipo de recomendaciones, con las que alienta a los pediatras a dar, además de consejos, libros para niños a las familias con carencias.
