En diálogo con Noticias de Salud Radio, la Dra. Débora Egea, explicó por qué es clave derribar el tabú que existe entre varones sobre el examen tacto digito rectal. En su columna radial URO CAFÉ, la médica también tocó los temas de eyaculación retardada y cáncer testicular. Noviembre azul es el mes de la salud masculina y pone el foco en la prevención del cáncer de próstata y testicular, entre otras.
Así como existe un octubre rosa para crear conciencia en mujeres contra el cáncer de mama; hay un noviembre azul para los hombres o “Movember”, término que fusiona las palabras en inglés «Moustache» (bigote) y el undécimo mes del año del calendario gregoriano.
Cuenta la historia, no tan lejana, que en 2003 un grupo de motoqueros de la ciudad de Melbourne (Australia) perdieron a un compañero de ruta diagnosticado con un cáncer de próstata avanzado.
Así fue como estos hombres empezaron a dejarse el bigote en sus viajes en moto como símbolo de lo importante que es visitar al urólogo una vez al año para realizarse los controles correspondientes y prevenir esta enfermedad asintomática que es el segundo cáncer masculino más frecuente, pero que con un diagnostico precoz tiene excelentes pronósticos según los expertos.
“Noviembre azul o Movember es una movida de la gente para la gente que se volvió viral a tal punto que en muchos países del mundo siguen la consigna de afeitarse por completo el 1° de noviembre y dejarse crecer el bigote hasta el último día del mes”, contó la Dra. Débora Egea (MN 141.469) Jefa del Servicio de Urología del Hospital Central de San Isidro.
Sobre el temor al tacto rectal por parte algunos hombres, Egea (una de las pocas mujeres al frente de un servicio de urología en hospitales) señaló: “El examen de próstata sigue siendo el tabú más grande entre los hombres”.
Y sumó: “Lamentablemente, no hay un estudio que reemplace tocar la próstata. El análisis de sangre antígeno prostático específico (PSA) puede dar normal, pero con el tacto los urólogos podemos descubrir alguna zona más dura e indicar una biopsia y poder enfrentar un posible cáncer de próstata”.
“Si lo pensamos fríamente el examen de próstata dura menos de cinco segundos y solo es una vez al año”, arengó la uróloga en su columna radial “URO CAFÉ” del programa Noticias de Salud Radio.
En Argentina cada año se diagnostican más de 11.000 casos de cáncer de próstata y deja unas 3.600 muertes.
“Dra. me siento increíble”: la sorpresa al recibir el diagnóstico:
“Es una frase que escucho muy seguido por parte de los pacientes. En 2023 en San Isidro hicimos una campaña urológica en las calles y nos encontramos con la sorpresa de que una gran cantidad de personas mayores de 70 años nunca habían consultado al urólogo y se enteraron en ese control que tenían cáncer de próstata”, recordó Egea.
Y enfatizó: “Por eso, es clave controlarse sin esperar a que haya un síntoma que nos genere malestar en la salud. La detección precoz es todo”.
¿Cuándo?
Si hay antecedente paterno de primer grado (padre, tíos o hermanos) a los 45 años empiezan los controles de próstata que incluyen PSA más examen digito rectal. Si no, a partir de los 55.
Síntomas:
Dificultad al orinar (mucho goteo al final), orinar con sangre, ir muy seguido al baño con una necesidad imperativa y urgente.
“Para tener una idea la consistencia normal de la próstata debe ser como la punta de la nariz. Todo lo que sea más duro nos hace sospechar de una enfermedad, por lo que es necesario biopsiar”, completó la especialista.
¿Qué función tiene la próstata?
“Más del 90 por ciento del volumen del semen es parte del líquido prostático y líquido seminal”, explicó Egea sobre esta glándula cuya función es “generar un líquido prostático que acompaña al semen hasta llegar al objetivo de la fecundidad para poder fertilizar un ovulo”.
“No tengo orgasmos”: eyaculación retardada
“Se presenta cuando el paciente tiene dificultad de eyacular y por lo general tarda más de 40 minutos. El dato más importante además de conocer la historia clínica es saber si esto ocurre hace un tiempo o es de siempre, porque los diagnósticos son totalmente diferentes”, explicó la Dra. Débora Egea.
Y agregó: “Es que puede haber una malformación, por ejemplo, que no esté comunicada la vía seminal con la urinaria o que el origen sea el consumo de algún medicamento antihipertensivo, diuréticos, antidepresivos o un déficit hormonal (valores alterados de testosterona)”.
Curiosamente, en los más jóvenes –amplió Egea- este trastorno puede ser el resultado de cómo ha sido su construcción sexual, es decir, “si su desarrollo sexual fue en base a mirar todo el día películas eróticas puede suceder que cuando tenga relaciones sexuales en la realidad haya eyaculación retardada. Simplemente, porque lo que vio en la pantalla muchas veces no coincide con lo cotidiano”.
En la eyaculación precoz, en cambio, uno de los tratamientos puede ser indicar un antidepresivo; ya que “como efecto secundario logra retardar la eyaculación. Por eso, a veces, hablamos con el psquiatra del paciente porque quizás haya que cambiar de medicación o reducir la dosis”, explicó la Jefa de Urología del Hospital Central de San Isidro.
En tal sentido, la médica señaló que para lograr buenos resultados en estos tratamientos es clave abordar el tema con un equipo de especialistas.
“Además del urólogo, también es clave el rol de la psicosexóloga, entre otros. Es que la eyaculación retardada también podría ser causa de un estrés patológico en cualquier ámbito de la vida, entonces difícilmente la persona pueda desempeñarse a nivel sexual”, aseguró Egea.
Por último, para ponerle una pizca de gracia y alentar a los hombres a que visiten una vez al año al urólogo, Egea citó a un compañero del hospital que suele repetir entre colegas “un dedo al año no hace daño”.
Se trata nada que del Dr. Daniel López Rosetti, quien recordó que en el país se logró una gran conciencia de consulta ginecológica gracias Tita Merello (actriz, vedette y cantante argentina).
“Muchacha, hacete el Papanicolaou”, solía decir sin asustar arengando así esta consulta entre las mujeres. Tenemos que lograr esa cultura también en los hombres para que consulten al médico urólogo. El machismo ya pasó de moda”, remató López Rosetti.
