Tras las críticas del ministro de Economía por el fuerte aumento de más de un 150% en los primeros meses del 2024, las empresas de salud privada pidieron una reunión con el gobierno y explicaron que la inflación “también afectó sus costos y que no son formadores de precios”.
“Las empresas de medicina prepaga le están declarando la guerra a la clase media”, señaló el ministro de Economía, Luis Caputo, en declaraciones a TN, tras los fuertes aumentos de más de un 150% de la salud privada en los primeros meses del 2024. Desde las cámaras que nuclean a las empresas de medicina prepaga pidieron una reunión urgente con el gobierno y se justificaron explicando que “la inflación también afectó sus costos de la misma forma que a cada familia argentina” y que “no son formadores de precios”.
En tal sentido, dice parte del comunicado, “estamos seguros de que con un dialogo responsable y transparente se podrá llegar a acuerdos que contemplen la necesidad de todos los actores. El sector está dispuesto a acompañar, dentro de las reales posibilidades, los esfuerzos del gobierno por resolver los problemas de fondo de nuestro país”.
Preocupado por los aumentos, Caputo, a través de su cuenta social de X, prometió: “Desde el gobierno, vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para defender a la clase media”, en sintonía con el propio presidente Javier Milei, quien tiempo atrás en una entrevista con Chiche Gelblung había asegurado que las prepagas solo aumentarían una vez.
Para tener una dimensión del aumento para abril de 2023 un plan familiar rondaba los 123 mil pesos, más de $ 400 mil en febrero y, actualmente, casi $ 600 mil.
Lo cierto es que durante el gobierno anterior las prepagas no tenían autorizado aumentos en un contexto de devaluación permanente del peso, suba del dólar. También es para tener en cuenta que los insumos y repuestos de los equipos en los cuales los pacientes se realizan estudios son comprados en el exterior y pagados en dólares. Sin embargo, para Captuto a las prepagas “se les recontra fue la mano” con los aumentos.
¿Esos aumentos habrán beneficiado a los médicos? La realidad es que cada vez más especialistas de la cartilla dejan de atender a través de las prepagas porque no les rinde económicamente. También es una realidad que cada vez más gente abandona la salud privada y se vuelca a la colapsada salud pública.
El anhelo del gobierno de una competencia sana parece no estar cumpliéndose. No mucho tiempo atrás diputados de la Coalición Cívica realizaron una denuncia contra las prepagas ante la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia por carterización, en alusión, a que la Unión Argentina de Entidades de Salud acordó y fijó un precio que golpeó duro el bolsillo de las familias. “Eso no es competencia, es abuso”, acusó este bloque legislativo en su momento.
